Rusia ataca fábrica de misiles cerca de Kiev y Zelenski
El presidente ucraniano dice "hacer la guerra mucho más corta" si suministran a Kiev las armas que solicita

Rusia, que prometió intensificar sus ataques contra Kiev, bombardeó ayer cerca de esta capital una fábrica de misiles Neptune, con los que los ucranianos aseguran haber hundido el buque ruso Moskva, y el presidente Volodimir Zelenski afirmó que la guerra podría ser mucho más corta si los países occidentales le entregaran las armas que solicita.
Un funcionario del Departamento de Defensa estadounidense afirmó que el crucero ruso, de 186 metros de eslora, fue alcanzado el jueves por dos misiles ucranianos y lo calificó de “gran golpe” para Rusia.
Sin embargo, este país había dicho hasta ahora que el Moskva quedó dañado por un incendio tras la explosión de sus propias municiones y que la tripulación había sido evacuada.
Unas afirmaciones que desmintió una oficial militar ucraniana. “Observamos cómo los barcos intentaban ayudar, pero incluso las fuerzas de la naturaleza estaban del lado de Ucrania”, ya que “una tormenta impidió el rescate del barco y la evacuación de la tripulación”, señaló Natalia Gumeniuk, portavoz del mando militar del sur de Ucrania.
“Somos perfectamente conscientes de que no nos lo perdonarán”, añadió, refiriéndose a Rusia y a posibles nuevos ataques.
La pérdida del Moskva es un duro golpe para Rusia porque “aseguraba la cobertura aérea de otras naves durante sus operaciones, especialmente para el bombardeo de la costa y las maniobras de desembarco”, explicó el portavoz de la administración militar de Odesa, Serguéi Bratchuk.